Cada edad tiene unas necesidades nutricionales y calóricas distintas. Son totalmente distintas, por ejemplo, durante la infancia que durante el embarazo o la menopausia. Los nutrientes varían según el cuerpo de la mujer va evolucionando.

De esta forma, el Dr. Domingo Carrera, médico especialista en nutrición de CMED, establece 6 etapas en la vida de la mujer en las que la alimentación debe ser distinta: 

1. 1. Entre los 4 y 8 años: 1.200 y 1.800 kcal diarias
   2. Entre los 9 y 13 años: 1.600 y 2.200 kcal diarias
   3. Entre los 14 y 18 años: 1.800 y 2.400 kcal diarias
   4. Entre los 19 y 30 años: 2.000 y 2.400 kcal diarias
   5. Entre los 31 y 50 años: 1.800 y 2.200 kcal diarias
   6. De 51 años en adelante: 1.600 y 2.200 kcal diarias

La variación depende de si la mujer tiene una actitud sedentaria o por si por el contrario lleva un vida activa. 

El Dr. Carrera explica que las grasas no deben exceder en ningún caso el 30% de la ingesta diaria, aunque se debe reducir el porcentaje a partir de los 51 años hasta el 20-25%.

Los carbohidratos deben ser, principalmente, en todas las etapas de combustión lenta, pero en las primeras etapas pueden ser del 60% de la ingesta diaria para pasar a ser de entre el 40-45% con la llegada de la menopausia o a partir de los 51 años.

Sin embargo, el consumo de proteínas debe ser más alto en la última etapa de la vida de la mujer, de entorno al 30-40%, debido a que se pierde masa muscular, apunta el nutricionista de CMED. 

 

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